KommtEssen: las recetas llaman a la puerta

KommtEssen no es un supermercado como los que todos conocemos. No se trata de un lugar al que ir con un carro y decidir qué llevarse a casa. KommtEssen ofrece un servicio de reparto de menús para cada día de la semana: recetas e ingredientes para preparar comidas para cuatro personas durante cinco días, a un precio concreto de 87 euros.

Un atrevido e innovador sistema que, desde hace un año, sigue el ejemplo de los vecinos países escandinavos en la ciudad alemana de Hamburgo, tal y como nos cuenta la propietaria de KommtEssen, Lisa Rentrop: “El concepto de KommtEssen viene de Suecia, igual que yo. En 2007 comenzaron con este negocio unos amigos míos en Suecia, y tuvo muchísimo éxito. Hasta el momento, un buen porcentaje de suecos ya cuentan con un servicio de reparto de menús semanales. Está marcando tendencia, y así pasará también aquí, en Alemania”.

Con el concepto de KommtEssen, los carros de compra están en peligro de extinción.

Variedad fácil

KommtEssen ofrece, ante todo, comodidad y ahorro de tiempo; elementos muy apreciados para todos aquellos a los que nos gusta la cocina casera pero no gozamos de todo el tiempo que desearíamos para dedicarnos a ello.

Pero también, y en ello insiste Lisa Rentrop, calidad y variedad. Los productos deben ser siempre frescos y naturales, y las recetas no se repiten hasta pasadas por lo menos seis semanas.

“Solemos guiarnos por el esquema semanal de los suecos y las reacciones de su público, ya que los clientes aportan sus opiniones. Las cosas que no han tenido éxito en Suecia las cambiamos por especialidades alemanas: recetas con espárragos, con col rizada, que no es muy común en Suecia, albóndigas de Königsberg, huevos con mostaza... Hay muchas alternativas deliciosas que incluimos.”

Los productos deben ser siempre frescos y naturales.

Cocina casera para cada estación

Y ahí no acaba la cosa: cada receta está muy pensada para cada momento y lugar, con el fin de que los clientes disfruten de la auténtica comida casera que apetece en cada momento del año: “A la hora de elegir los productos, tenemos en cuenta el clima y la zona a la que van dirigidos: hacemos recetas estacionales.”

¿Qué más se puede pedir? Pues que esta tendencia se extienda para que todos podamos disfrutar de estas facilidades en nuestras casas y dejar de preocuparnos por ir al supermercado o por calcular el presupuesto semanal.

Por el momento, la idea ya triunfa en Suecia y en Hamburgo, y como muestra de su buena labor, Lisa Rentrop nos ha prestado una receta de su enorme lista para que nosotros podamos disfrutar cocinándola en nuestras casas. Hoy vamos a preparar una crema de calabaza con chips de queso parmesano.

Crema de calabaza con chips de queso parmesano

Ingredientes

1 cebolla
1 naranja
1 calabaza cucurbita moschata o butternut (alargada y de color naranja claro)
2 zanahorias
2 dientes de ajo
250 ml de vino blanco
800 ml de agua
150 g de queso parmesano
100 g de crema o nata
1 ½ cucharadas de caldo de carne
1 ½ cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de jengibre molido
Sal, pimienta negra, pimienta de cayena y cilantro

Preparación

Picar la cebolla, lavar la naranja y pelarla sin tirar las mondaduras.

Pelar la calabaza, quitarle las semillas y cortarla en trozos pequeños. Pelar las zanahorias y cortarlas en láminas de medio centímetro.

Calentar el aceite de oliva y freír a fuego medio durante dos minutos los dos dientes de ajo junto con las mondaduras de naranja, la cebolla y una pizca de pimienta de cayena.

Poner a calentar el caldo y añadir la calabaza, la zanahoria, el jengibre, el vino blanco, el agua y el jugo de la naranja. Dejar cocinar durante 15 minutos.

Cortar el queso en láminas finas. Poner 8 láminas en papel de hornear y meter al horno precalentado a 225 ºC durante 5 minutos.

Añadir la crema o nata, una cucharadita de sal y una pizca de pimienta negra a la sopa. Batir con una batidora.

Sazonar con cilantro y servir con las láminas horneadas de parmesano extraídas del horno y, como ingrediente opcional unas rebanadas de pan endurecido Knäckebröd.

La voz de nuestros usuarios

“Mi padre es alemán, pero vivimos en Costa Rica. Cuando él llegó acá, se adaptó a la cultura, por lo que yo no aprendí alemán, ni llegué a conocer mucho sobre sus costumbres o tradiciones. Gracias a la Deutsche Welle he aprendido muchas cosas sobre Alemania. Ayer le comenté a mi padre que iba a preparar Flammkuchen: ¡le brillaron los ojos y de inmediato me llevó a comprar los ingredientes! La comimos para la cena acompañada de puré de papas. ¡Simplemente deliciosa! Mi próximo intento será Käsekuchen”.

Natalie Schwarz, Costa Rica

Autora: Lydia Aranda Barandiain / Lisa Rentrop
Editora: Rosa Muñoz